En el año de 1992 en la educación preescolar se concibe como un proyecto de construcción pedagógica que integran los objetivos del educando como ser único y social permanentemente con su entorno familiar, natural, social, ético y cultural además la integración de las dimensiones del desarrollo humano: afectiva, social, intelectual, física, espiritual, cognitiva, comunicativa y estética; está comprendida como los aspectos más importante de la personalidad humana, por lo tanto la dimensión afectiva muestra la integración de la familia y el medio que lo rodea proyectando sus emociones y sentimientos a través de actividades que enriquecen o estimulan su auto estima para un mayor desenvolvimiento en la vida social, el niño es un ente activo que adquiere el aprendizaje por medio de vivencias o acontecimientos que nutren y enriquecen el lenguaje significativo de la historia, local, o regional construyendo un conocimiento lógico hacia una realidad concreta, así mismo el desarrollo cognitivo ha logrado una gran revolución y significativos, proponiendo teorías que facilitan el entendimiento de las diferentes dimensiones; además la forma de comunicación que establecen los niños transformando en cierta medida el contexto al expresar con confianza y respeto, emociones, sensaciones y sentimientos; generando un mundo imaginario donde solo existe paz, armonía sin destrucción alguna, considero que todos los docentes deben reconocer y tener en cuenta las diferentes dimensiones del niño como elemento e instrumento para contribuir en el proceso formativo e integral de toda persona; actualmente todo docente que no maneje las dimensiones con exactitud será un docente sin perspectivas para el manejo del desarrollo de las capacidades criticas, reflexivas y analíticas de cualquier ser humano, es destruirá su futuro para la solución de problemas enfrentados por la vida cotidiana.
viernes, 11 de septiembre de 2009
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